Muchas empresas o emprendedores no aprovechan las oportunidades de la red, en la mayoría de los casos porque no las conocen y en otros miedo a lo desconocido.
El cliente moderno necesita más, quiere que las empresas, se muestren de forma honesta y transparente, con el que se puedan comprometer los consumidores.
La creencia de que tener un objetivo significa “ser social” Pero niega la verdadera realidad, el verdadero objetivo: desempeñar un papel activo en las vidas y las pasiones de los nuestros seguidores, fans, clientes. Son las empresas y las organizaciones que ponen sus objetivos en el corazón las que son capaces de generar una nueva pasión en sus clientes y en sus empleados. Toman el poder de la marca, y consiguen hacerse relevantes para sus clientes.
El impacto social se está extendiendo como métrica empresarial, y son cada vez más las empresas que eligen relacionar sus decisiones económicas con el valor que han creado a través de esfuerzos sociales, medioambientales, laborales o políticos.
Marcas como IBM, que se ha renovado bajo el lema“Smarter Planet” en un perfecto ejemplo de cómo una compañía puede encontrar nuevos objetivos y reconfigurar su negocio, Nike Foundation, que busca expandir las oportunidades para las niñas y mujeres jóvenes de todo el mundo, y el gigante Google que define todo lo que hace bajo el principio “organizar la información del mundo y hacerla accesible, útil y gratis»